¡¡¡Zapatero a tus zapatos!!! reza una máxima, pero con el avance tecnológico de los últimos años esto ya no es así. Empresas e industrias que antes tenían un giro en específico, ahora abarcan muchos más, tal es el caso de Apple y de Samsung que en los años recientes le entraron al negocio de los relojes, pero no cualquier reloj, sino relojes inteligentes.
Esta incursión desplazó a empresas tradicionalmente relojeras, que ahora reclaman su lugar. Tal es el caso de Swatch, el conglomerado relojero más grande del mundo, y que esta demandando a Samsung pues asegura que la compañía surcoreana ha infringido su marca registrada con el diseño de esferas para sus relojes inteligentes.
Swatch solicita una compensación de más de 100 millones de dólares en concepto de daños, pues asevera que Samsung quiere utilizar la fama que por décadas ha construido la relojera suiza. Por el momento Samsung no ha emitido ningún comentario al respecto.