Con la idea de reforestar el país, el gobierno tailandés ha implementado desde el 2013, un plan que consiste en arrojar desde el aire semillas de árbol, para así poder plantar en tiempo récord miles de ejemplares. Con la utilización de aviones de la fuerza aérea, se han distribuido a lo largo de todo el país miles de semillas que se espera comiencen a dar resultado a principios del 2020.

Fue en la región de Phitsanulok donde se dio inicio con este proyecto, abarcando zonas deforestadas de más de 800 hectáreas. Estas semillas especiales están hechas de una mezcla de barro, tierra, compost y semillas de varios tipos de árboles locales, que permiten que el ciclo de germinación pueda iniciar sin contratiempos.

Aunque sin ser una idea nueva, pues quien la uso primero fue el japonés Masanobu Fukuoka, quien buscaba reforestar ciertas áreas en las montañas de Honolulu, Hawái allá por la década de los 30 del siglo pasado, parece que el gobierno tailandés esta seguro de poder revertir el gran daño a sus ecosistemas por parte del ser humano.